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Tomado de: Oficina de Comunicaciones, Información y Prensa ASMEDAS Antioquia
Por: Médico asmedista Juan Fernando Uribe Duque (foto)
Escritor, poeta
La mediocridad y la corrupción imponen un lenguaje y una actitud ante el mundo. El hecho de que algunos senadores, con muy poca raigambre intelectual, hayan votado en contra de la reforma al sistema de salud, da clara muestra del precario contenido de un pensamiento social, y sí de una avidez por hacer que sus patrones sigan saqueando los dineros públicos. No creemos que el español dueño de Sanitas -Keralty- esté muy complacido con el aparente triunfo, pues sabe que lo logrado por sus muchachos a sueldo es flor de un día dada la contundencia de un mandato popular como el del actual gobierno que ya inicia la lucha por sacar adelante las reformas necesarias para que el país entre en una vía de desarrollo equitativo, impidiendo, por lo demás, que se continúe con el saqueo y la doble moral de quienes han sido sus dirigentes.
La expedición de los decretos pertinentes y la apelación ante la plenaria del Senado revivirá el debate y dejará en la palestra de la corrupción y la ignorancia a los vociferantes que pretendieron acabar con una necesidad sentida por las mayorías excluídas. Recordemos que con el sólo carnet de la EPS no se asegura la atención, menos en los seiscientos municipios en donde no hay un puesto de salud ni agua potable.
La caída del edificio Space y la del puente Chirajara es una imagen que no podemos borrar de la memoria. Ahí está representada esa clase dirigente que tuvo que pagar cuarenta millones de dólares al gobierno de Estados Unidos para evitar el escándalo por los sobornos y el negociado con Odebrecht, las vías 4G, el doctor Cianuro y Óscar Iván. No mencionemos a Silva Beckinbach, el ladrón del cartel del petróleo, ni a los demás, ya muchos en “uso de buen retiro”, disfrutando de sus haciendas y empresas creadas con porcentajes y sobornos.
El llamado a juicio del expresidente Uribe ya prende las alarmas y el repliegue de las fuerzas que él representa tomará otras características o simplemente intentarán un “pacto” ahora si histórico, pues no les interesa sumir al país en la incertidumbre, menos en una guerra en la que lo perderían todo.
La nueva fiscalía prende motores, aunque no sabemos con qué trapisondas y hasta dónde llegarán sus logros. A lo mejor, ya todo esté pactado para que “la pita se rompa por el lado más delgado”, así creamos que con la citación a juicio del expresidente se inicie otra época conservando la esperanza en un mejor país. Pero de estar equivocados, de pronto con las nuevas evidencias de corrupción en las anteriores administraciones, se inicien los procesos penales respectivos y, por fin, veamos que la justicia, no por divina, se demora pero llega.
NOTA: La guerra -por desgracia- contra las disidencias traidoras del cese al fuego, muestran a unas fuerzas armadas competentes y comprometidas con la salvaguarda del país.
Tomado de: Oficina de Comunicaciones, Información y Prensa ASMEDAS Antioquia
