Carta a un amigo

Tomado de: Oficina de Comunicaciones, Información y Prensa ASAMEDAS Antioquia

Por: Médico asmedista Juan Fernando Uribe Duque (foto)
Escritor

 

Compañero:

El mundo que nos plantea Gustavo es hermoso: campesinos felices, cielos azules, tierra fértil y abundante agua, grandes cultivos, familias sonrientes, el campo lleno de paz, un turismo multitudinario y alegre, ferrocarriles a través del Darién, paneles solares, molinos de viento, latifundios con función social, comunidades negras e indígenas con oportunidades, educación, tierra y prosperidad; políticos honestos (¿Piedad Córdoba?  ¿Benedetti?), una niñez llena de cuidados, ciudades seguras, pleno empleo, sector financiero controlado y compitiendo con una banca pública saneada, salud sin intermediarios con mirada preventiva, IPS apoyadas directamente por el Estado, renta básica, programas de educación gratuita, contratación transparente, legalización de la producción de cocaína y reglamentación de su consumo, desmonte de los fondos privados de pensión.

Qué más quisiéramos, un país ideal, hermoso y por ahora utópico… pero se debe empezar por lo básico, saneando las arcas del Estado, «generando caja» para impedir que la quiebra y el despilfarro se sigan disimulados por los empréstitos y la continua hipotecación del país a la banca internacional o a las multinacionales.

Se debe respetar la tenencia de la tierra para no generar una guerra civil contra los señores feudales, pero sí EXIGIR mediante estudios agrológicos el cultivo de los alimentos que importamos mediante contratos y ayuda crediticia y técnica del Estado. Sustituir importaciones y generar productividad. Subir salarios para que los pobres tengan poder adquisitivo y se reactive la economía, vigilar y revisar contratos para recuperar desfalco y judicializar ladrones (cadena perpetua, como dice Tobón Quintero).

Manejar el problema del narcotráfico inicialmente como un problema de salud pública e ir pactando la paz con las guerrillas y Bacrim dedicadas al negocio. Saneamiento básico y agua potable para todas las comunidades con los 5 billones que se pueden recuperar de los 55 que nos roban cada año.

Primero barremos y sacudimos. Después trapeamos.

Nota: «Están pagando a $800 un cemento que cuesta $50.

 

Tomado de: Oficina de Comunicaciones, Información y Prensa ASAMEDAS Antioquia