Urge asegurar las condiciones de trabajo de los profesionales de la salud que les permita evitar la expansión descontrolada de la pandemia en el territorio nacional y la prevención de futuras epidemias

Comunidad Académica Facultad Nacional de Salud Pública “Héctor Abad Gómez”– Universidad de Antioquia

Tomado de: Oficina de Comunicaciones Facultad Nacional de Salud Pública

La Comunidad Académica de la Facultad Nacional de Salud Pública “Héctor Abad Gómez” de la Universidad de Antioquia, atenta y preocupada por la evolución de la pandemia del COVID-19 en el mundo y en todo el territorio nacional, alzamos hoy nuestra voz para reclamar la estabilidad laboral del personal de salud y de salud pública y las debidas medidas de protección para todos los profesionales, técnicos, auxiliares, personal administrativo y de apoyo de las instituciones de salud del país.

El control de la epidemia COVID-19 ha sido posible cuando se ha contado con personal de salud con contratos a términos indefinido, cuyo conocimiento y experiencia de las anteriores pandemias, ha permitido poner en marcha eficientes y oportunas medidas de control.

El avance de la organización de los servicios de salud y el fortalecimiento de la salud pública requiere que el personal de salud tenga estabilidad laboral como condición indispensable para anticipar y planear en el corto, mediano y largo plazo, la prevención de emergencias y de futuras pandemias.

No podemos aprender en pocas semanas cómo enfrentar emergencias, desastres o epidemias, si los equipos de salud y salud pública tienen constate rotación, desempleo e inestabilidad laboral.

Son indispensables la protección del trabajo en salud y salud pública, el pago de sus salarios, en muchos casos con meses de atraso, y la implementación de políticas de protección al personal, antes que se vean obligados a abandonar su trabajo, para buscar otras actividades que provea el sustento de sus familias.

Como Facultad, hemos puesto todas nuestras capacidades al servicio del manejo de la situación de emergencia actual, compartiendo nuestros recursos y capacidades con las entidades de los Gobiernos nacional, departamental de Antioquia y municipales, así como con las comunidades.

Nos abruman las abundantes denuncias y noticias sobre la falta o ausencia total de los equipo de protección personal (EPP) de quienes están encargados de la atención de los casos sospechosos, probables y/o confirmados de la infección por COVID-19, en las instituciones de salud, en las comunidades, en el seguimiento de sus contactos, en la búsqueda de nuevos casos, y que además continúan atendiendo la demanda de servicios relacionada con otras patologías y situaciones de salud.

Las renuncias de médicos en hospitales, la falta de suministros médicos y de elementos de protección personal, las denuncias de discriminación en la provisión de dichos suministros hacia algunas de las profesiones, entre otros más, hablan de una situación alarmante en el manejo de la pandemia que puede agravar aún más la situación actual. Cuando el personal empiece a escasear debido al contagio por las razones anotadas, se correrá el riesgo de que el manejo del problema se salga completamente de las manos y las consecuencias para el país serán desastrosas.

Llamamos igualmente la atención sobre la necesidad de aumentar el personal asistencial al servicio tanto del manejo de los pacientes que presentan el COVID 19, como del resto de pacientes regulares que requieren servicios de salud. Para ello, hoy hay profesionales, técnicos y auxiliares que quedaron cesantes por el cierre de consultorios, clínicas y laboratorios clínicos, debido a las medidas de aislamiento social, además de los que ya venían estando en condición de desempleo, que pueden ser rápidamente vinculados en los diferentes servicios, como una medida de urgencia y para el manejo de la situación actual y venidera.

Por ello, instamos con urgencia a todas las autoridades del país, en los órdenes Nacional, Departamental y Municipal, así como a Directivos de EPS, IPS y ARL en estos momentos en los que la situación puede ser manejable tanto con medidas urgentes en lo dicho, como en previsión de los momentos venideros, de acuerdo con la evolución de la pandemia en nuestro país.

 

COMUNIDAD ACADÉMICA
Facultad Nacional de Salud Pública – Universidad de Antioquia
1 de abril de 2020

 

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